martes, 24 de febrero de 2009

Muñeca rusa

Adentro y afuera
en todos lados
soy yo

la misma/distinta
la madre de todas

la que salpica estocadas
como bendiciones
y duerme acurrucada
de mil formas

soñando con ellas
las que vendrán

esas

las que se incrustan
como parásitos dolidos

bien adentro
esperando la luz del espejo
roto
para encontrar
a la gata que no maúlla


me destapo de una vez
y me descubro

con gracia

como quien da un buen salto
dejando en casa

los paracaídas.

3 comentarios:

Tears dijo...

Sin paracaidas, aunque ha decir verdad aunque lo tengamos a cuestas las caídas libres siempre terminan en un estrepitoso encuentro con la realidad... Como tirar un huevo del 10º piso...



En fin..

Dulces lunas.

sieteojos dijo...

profundo poema, de dolor infantil, dolor sin culpa luego vertiginoso, bello, no usaste la fígura maqueteada de la muñeca rusa, escapaste del fetiche, felicitaciones

mem dijo...

saludos!!

me gusta tu ritmo